Al chef de cocina Kristof Deprez del restaurante De Mangerie, le encanta de vez en cuando hacer un sutil guiño de ojos al Lejano Oriente, sin perder de vista los clásicos de la cocina belga. Clásicos que además se sirven en un nuevo embalaje. La suma de todas estas delicias es una mezcla diferente e innovadora de lo mejor que el mundo puede ofrecer. Algunos platos también se pueden solicitar en su versión exenta de pescados o carnes. Todo este quehacer de cazuelas y sartenes se puede admirar desde el cálido y agradable restaurante a través de la cocina abierta.