Basiliek van het Heilig Bloed (Basílica de la Santa Sangre)

La Basílica de la Santa Sangre fue elevada a la categoría de Basílica en 1923, debido a la especial veneración de la Santa Sangre. Está  compuesta por una capilla inferior y otra superior. La capilla inferior, dedicada a San Basilio, es un raro ejemplo de arquitectura románica en el litoral. El oratorio de austera decoración está recubierto de bóvedas espinales de piedra que descansan sobre robustos pilares. Sobre la entrada de la nave lateral se descubre un curioso semirrelieve con la representación del Bautizo de Cristo (taller de Doorniks del siglo XII).

Mediante la caja de escalera de Ter Steeghere, con una fachada construida con azulejos de estilo transitorio del gótico tardío al renacimiento temprano, se llega a la capilla superior. La reliquia de la Santa Sangre, que supuestamente la trajeron los cruzados a Brujas, se conserva en este espacio en la capilla del mismo nombre. Esta capilla se erigió en el siglo XV en estilo gótico, pero guarda especialmente importancia por su aspecto neogótico del siglo XIX. La capilla también acoge el museo de la basílica, una especie de tesoro con numerosas y valiosas obras de arte, sobre todo relacionadas con la veneración de la reliquia de la Santa Sangre. La colección del museo incluye obras de arte de que forman parte de la lista de obras maestras flamencas, como el Gran Santuario de la Santa Sangre realizado por el platero Jan Crabbe en 1614.